De buenas a primeras, Edgardo Kueider se convirtió en el enemigo público número 1 del peronismo entrerriano. Todos abominan de él, e inclusive el mismísimo ex gobernador Gustavo Bordet hace la de San Pedro.... Kueider pone el cuerpo para organizar al PJ entrerriano y logró encolumnarlo detrás de él -aunque sea para que lo pute*n-, y conseguir recursos para la provincia, argumentan cercarnos a él
La firma del Senador Nacional Edgardo Kueider en disconformidad del dictamen a la Ley Bases de Javier Milei, generó múltiples reacciones. Desde las felicitaciones de concejales de La Libertad Avanza, del intendente Francisco Azcue y de sectores del PRO y la UCR, hasta el repudio generalizado de todo el arco del Justicialismo Entrerriano.
Lo que no había logrado la renovación interna de autoridades durante el verano, lo que no había logrado el tener a un dirigente de otro signo político en el principal cargo ejecutivo de la Provincia (el gobernador Rogelio Frigerio) ni en el principal cargo ejecutivo de la Nación (el presidente Javier Milei), lo logró el Senador Kueider. El peronismo de la provincia, al fin, se unió, al menos en lo discursivo.
El legislador mantiene absoluto silencio. No argumenta su decisión, pese a las críticas de todo tipo que recibe, desde ser acusado de "traidor" (lo que en la jerga peronística, integra la tríada de los peores insultos posibles a recibir), hasta quienes piden su desafiliación.
LOS (buenos) MOTIVOS DE LA FIRMA
No se sabe porqué cuando todo el peronismo entrerriano fijó una posición, Kueider fue a contramano. Se dice que conseguirá la provincialización de la represa de Salto Grande, el pago de la deuda por excedentes y regalías, y una recomposición de la tarifa que se le abona a Salto Grande.
Así lo esgrimió ElEntreRíos en una editorial que se preguntan ¿si el "villano de hoy", será el "héroe de mañana"?
LOS (malos) MOTIVOS DE LA FIRMA
Por su parte, una nota publicada en DiarioJunio señala otros motivos. El artículo periodístico da cuenta de una reunión por zoom entre el Senador y algunos Intendentes Justicialistas. En ese encuentro virtual, el legislador habría confesado "que iba a jugar su partido propio" porque se enteró que no lo tenían en cuenta para el armado electoral del 2025.
La reunión ultrasecreta pero ventilada a todos los medios entre Miguel Ángel Picheto, Guillermo Michel y Gustavo Bordet junto a otros dirigentes peronistas en Gualeguaychú hace un mes, fue el detonante que desencadenó esta jugada.
Del cónclave Gualeguaychú saldrían los nombres de los candidatos a Senadores y Diputados Nacionales del peronismo del año que viene, con Gustavo Bordet y Guillermo Michel a la cabeza y -dicen algunos rumores de elucubradores analíticos- la inclusión del concejal Pablo Bovino en una de ellas.
Todo el arco del peronismo salió a criticar a Kueider por firmar el dictamen. O casi todo. Salvo el crestismo. El diputado provincial Enrique Cresto y su padre, el ex intendente Juan Carlos Cresto, como los principales dirigentes de la Agrupación Justa, Libre y Soberana, han mantenido silencio durante esta convulsionada y larga semana.
En las últimas elecciones, Kueider y Cresto fueron aliados en la disputa interna, aunque su alfil, el actual vocal de Cafesg, Armando Gay, no pudo coronar la estrategia con un triunfo. Los cuatro concejales que ingresaron por el peronismo responden, precisamente, a estos dos refentes; aunque uno de los concejales parece buscar diferenciarse de su albacea y ahora dialoga con quien ve un futuro personal más promisorio, como se dijo líneas arriba.
A CARA O CRUZ
Si con la firma en disidencia “el compañero logra que nos den la administración de Salto Grande y que nos paguen otra tarifa de energía para que los entrerrianos podamos pagar más barata la energía, si se comprueba que esas propuestas se han hecho, daría la sensación de que es por una cuestión noble”, consideró el presidente del PJ Entre Ríos, José Cáceres.
“Si nada de eso ocurre, se habilita el otro pensamiento: que ha habido un acuerdo non santo”, contrapuso en declaraciones a Radio Ciudadana.
UN PERONISMO, TODOS LOS PERONISMOS
Luego de esta agitada semana, han quedado evidenciados tres peronismos que se podrían graficar de la siguiente forma: el de las "bases" que podría encontrar una representatividad en los Consejos Departamentales o en algunos legisladores provinciales, con voz pero sin voto; el de la dirigencia clásica que tiene (o al menos ostenta) voz, voto y poder de decisión, representado en el Cónclave de Gualeguaychú; y Kueider.
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