Ante los cambios para adecuarse a vivir la nueva realidad, será el
tránsito a nuevos aprendizajes, asumir desafíos como informarse, lograr
nuevas herramientas, adecuarse y llevar adelante estrategias personales
para enfrentarlo sin complejos.
La aparición a un mundo que en
general no cuida a las personas desde su evolución, sus necesidades ni
particularidades, lo que conlleva ir perdiendo posibilidades
fisiológicas, neurológicas, motrices, morales y espirituales, que en
cada período resaltan y embargan nuestra salud y las expectativas de
vivir “más y mejor”.
El bebe debe recibir
correcta alimentación para favorecer el desarrollo sináptico; niño se le
debe sumar la cuota de movimiento y para evitar el síndrome de la
cabaña; y adolescente fortalecer sus sistemas e inmunológicas con
hábitos adecuados y saludables para evitar los procesos de ansiedad y
excesos; al adulto y el mayor debe alimentarse de esa Cultura Física que
los mantendrá alejados de los riesgos, favoreciendo un pensamiento
positivo, motivador y crítico.
La Pandemia
2020, puso en relieve e hizo visible las causas de esos riesgo, rompió
con el formato social preestablecido y profundiza el malestar emocional
con cambios notables; determinando circunstancias de emergencias
sociales impactantes: para la Familia en sus aspectos fraternales, la
Sociedad en su valiosa interrelación, en la Comunidad paralizando a su
fuentes laborales, de producción de servicios y de desarrollos
colectivos.
El Sedentarismo creciente es símbolo actual y de la pandemia:
En
nuestra civilización actual, nuestra cultura marcar un importante
crecimiento en un estilo de vida sedentario; que es una verdadera
amenaza para nuestra salud; hay investigaciones científicas que nos
informan que las personas pasan más de 8 horas de su vida sentada,
acostada, o en la mesa mirando televisión u otro dispositivo
tecnológico.
Si bien la mayoría miramos
televisión y nos conformamos y justificamos, es interesante comprender
lo que ocurre en nuestro país o en el mundo, tenemos real conciencia del
tiempo de nuestra vida que estamos frente a la pantalla de TV
diariamente pero igualmente, el pasatiempo visual nos entretenemos con
una película, o viendo un partido y la quietud es una amenaza creciente.
Estos
datos, no incluyen el tiempo que pasamos frente a la pantalla de
nuestra computadora, o sentados en el automóvil. Muchos son los efectos
negativos que genera el sedentarismo, pero el más importante es que le
resta para vivir más y mejor su vida activa, con una sobrevida mayor al
13% y de superior calidad.
Si una persona es
sedentaria aumentará de peso y también aumentará el riesgo de muerte por
enfermedad cardíaca o accidente cerebro vascular, que representaría un
tercio del total de mortalidad. Lo han comprobado los científicos, que
aspiran a que vivamos cada vez más y mejor.
La
cultura física con formación de Educación Física, mejora la propuesta de
la actividad física y del Deporte, haciendo la mejor a la calidad de
vida.
El avance científico y tecnológico nos ha
ofrecido grandes adelantos y nos ha permitido mejorar nuestro
bienestar. Pero cuidado, no seamos personas sedentarias. El
sedentarismo, es la segunda causa evitable de muerte, y debemos
comprender este riesgo.
Caminar, correr, subir
escaleras, evitar el ascensor, realizar actividad física diariamente,
practicar deporte regularmente es promover una actividad física para
toda la vida. Es por ello que hoy, entre todos debemos cultivar una
sociedad más activa y saludable desde el movimiento.
Es
importante marcar que la UNESCO en el año 1978 considera y establece a
la Educación Física, un derecho de todos quienes formamos parte de la
sociedad. Además marcar que en el año 2005 se proclamó el Año
Internacional de la Educación Física y el Deporte y que en la segunda
semana del mes de octubre, muchos países del mundo han acordado declarar
el Día de la Educación Física.
Estos
significativos hechos, se deben a que se comprobó, que practicar
regularmente actividad física contribuye con el desarrollo humano
durante toda la vida. Facilita que nuestros niños se desarrollen plenos,
saludables, recreativa e íntegramente.
Es
menester marcar, que además, contribuye a desarrollarse y crecer en
normas y valores. A establecer las bases adecuadas para enfrentar el
devenir, como un lugar de inclusión y de oportunidades.
A
que nuestros jóvenes, puedan contrarrestar e intervenir en los
comportamientos de riesgo como son el consumo de tabaco, de alcohol u
otras sustancias que amenazan su calidad de vida. A nutrirse
saludablemente; a prevenir la violencia o la formación de grupos
agresivos, inadecuados.
A que nuestros adultos y
adultos mayores sean más sanos, con mayor equilibrio, que trabajen
mejor, que canalicen las tensiones; en síntesis, que tengan una mejor
calidad de vida y un mejor bienestar.
A que
nuestros mayores vivan más y mejor. Que sea una etapa de la vida
igualmente valorada. Productiva en proyectos y esperanzas. De
integración y no de progresiva exclusión.
Y
esto significa que todos independientemente de la edad, del sexo, de la
raza o etnia, de la religión que practique, de su nivel de aptitud, sea
convencional, con talento o con alguna debilidad, o del nivel social,
cultural o económico que se pueda tener, tiene el derecho a la Educación
Física de Calidad.
Por todo esto, porque
aspiramos a una cultura actividad para toda la vida, compartimos estos
conceptos con usted y la/lo invitamos a que acompañe en este desafió de
construir entre todos desde la información – formación para poder luego,
ponerlo en práctica.
Está comprobado por
muchos estudios científicos, el valor de la Educación Física en todas
las etapas de la vida, destacando el rol del docente de Educación
Física, luego de la Pandemia, por lo que creemos es urgente la vuelta a
clases; Educación Física de Entre Ríos, en todos sus ámbitos podría
estar brindando un importante y gran aporte en beneficio de la salud
física y emocional.
“Apostemos todos, por una nueva cultura activa y saludable”
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